viernes, 31 de octubre de 2014




Atrévete a cambiar. Motivación al cambio
Por Carlos Valero Rico

Uno de los motivos más comunes por el cual asisten los adultos a mi consultorio o que me plantean en mis actividades grupales, es la incapacidad que tienen para confrontar y modificar situaciones que evitan que alcancen una mejor calidad de vida y completa satisfacción personal. Esta incapacidad se debe a que las personas se encuentran dentro de su zona de confort, el cual es un estado mental donde las personas alcanzan un nivel de funcionamiento neutral sin correr riesgos, otorgando prioridad a una falsa sensación de seguridad, antes que a su felicidad.
Para salir de la zona de confort, es necesario llevar a cabo un cambio personal. Este cambio es el proceso mediante el cual las personan adquieren nuevos pensamientos y patrones de conducta que lo ayudan a transformar o percibir de distinta manera las situaciones que lo rodean, para así poder tener una vida mejor. Este proceso está influenciado por dos factores fundamentales: las creencias limitantes y los miedos.
Las creencias limitantes son percepciones de la realidad que evitan que las personas avancen hacia una nueva meta o hacia la consecución de un objetivo. Por lo general estas creencias no son realmente ciertas, pero como nuestras mentes las creen verdaderas, nosotros las asumimos con tales. Se puede decir que estas creencias limitantes forman nuevos paradigmas personales, los cuales conllevan a que nos movamos en dirección contraria a lo que realmente queremos o que permanezcamos inmóviles. Estas pueden romperse y ser desechadas, utilizando una fórmula de tres pasos.
·         Tomar conciencia de que se tiene la creencia y preguntarse ¿en qué me beneficia?, ¿en qué me perjudica? y ¿Cómo sería mi vida sin esta creencia?.
·         Sustituirla por una creencia potenciadora y preguntarse ¿Cómo sería mi vida con esta nueva creencia?.
·         Repetir esta creencia hasta hacerla nuestra. Esta es la parte más tediosa y difícil.
En cuanto al miedo, debe ser abordado como una respuesta normal ante situaciones que nos generan desagrado, y que se evidencian a través de respuestas fisiológicas, de pensamiento y de conducta. El miedo no es completa ni necesariamente negativo, así como tampoco es completa ni necesariamente positivo, ya que será adaptativo o funcional, dependiendo de los resultados obtenidos. Lo interesante del miedo es que puede deberse a algo que pasó, que está pasando o algo que asumimos y pensamos que podría pasar; es en este último donde se conecta con el cambio, asumir que algo malo va a pasar, eso nos lleva a evitar movernos, presentando miedo al cambio. El miedo al cambio puede vencerse, cuando asumimos que forma parte de la vida, que es inevitable y que soy yo quien decide que dejaré o no que me afecte, me movilice y/o me paralice. La causa de todos los miedos está dentro de cada quien y cada quien, sin importar cuan terrible parezca la situación, define como responder ante eso. Existen siete pasos útiles para vencer el miedo:
·         Acepta que sientes miedo.
·         Reflexiona sobre cuál es la razón específica de tu miedo.
·         Recuerda y piensa en tus fortalezas y capacidades para confrontar no sólo ese miedo, sino cualquier situación que se presente.
·         Elige cualquier miedo que tengas, analízalo y llegarás a la conclusión de que tú eres la causa de todos tus miedos.
·         No te desanimes con esta conclusión, si piensas que tu miedo es algo externo a ti, siempre estará fuera de tu control. Si piensas que tu miedo es otra persona siempre controlará parte de tu vida.
·         Una vez reconozcas que tú eres la causa de tu miedo, podrás verte más fuerte que el temor y como alguien capaz de vencerlo.
·         Y lo más importante… ACTUA!!!
No podemos obligar a nadie a cambiar, en ocasiones no podemos cambiar lo que nos rodea o la situación que se plantea, pero si podemos cambiar nosotros, como percibimos las situaciones y como decidimos responder antes esas situaciones, para cambiar nuestra realidad, porque al final de la historia, nada es tan malo como lo imaginamos y siempre se puede conseguir algo hermoso de lo que un día nos pareció feo.
Te invito a recordar que si algo no te deja avanzar, corre riesgos y atrévete a cambiar.
 Carlos Valero
Lic. en Psicología
@carlosvalero84

Este programa fue conducido por la Locutora  Maria Alejandra Figueira Abreu y te regala esta Pildora de Felicidad:







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